Hoy en día hay muchísimos riesgos en lo que tiene que ver con la alimentación, los riesgos no están asociados solamente con la situación actual de pandemia pues siempre han existido.
En muchos países pobres los problemas asociados a las enfermedades por alimentos cobran la vida de muchas personas en su gran mayoría niños lo cual es muy triste.
Entre los grupos más propensos a verse afectados por problemas asociados a la alimentación encontramos: niños menores de 5 años, embarazadas, personas mayores de 70 años y los que tienen una sistema inmunológico delicado.
La seguridad alimenticia es tan necesaria como la seguridad del hogar, tal como los cerrajeros pueden dar buenas sugerencias para resguardar el hogar los especialistas en nutrición y salud tienen sugerencias útiles.
Aprendamos a comprar: Si no cultivamos nuestros propios alimentos lo más probable es que nuestro primer contacto con ellos sea en los supermercados. Para comprar alimentos sanos y seguros debemos:
1 Seguir un orden: La sociedad española de Nutrición recomienda comprar en el siguiente orden: primero los productos no perecederos, continuar con los frescos y luego los congelados y refrigerados.
2 Elija siempre productos frescos: si esta en las posibilidades se puede escoger comprar alimentos frescos, hay quienes tienen su carnicero de confianza y eso ayuda mucho.
Los sitios donde se puede escoger uno mismo los alimentos también son muy buenos porque permiten obtener los más frescos y que se adapten a nuestra preferencia.
3 Inspeccionar los productos: Por ejemplo con las frutas podemos examinar y pensar” ¿Tiene la piel en buenas condiciones? En cuanto a las carnes ¿despiden mal olor? Siempre es bueno conformar las fechas de caducidad de los alimentos envasados.
4 Tome precaución al transportar: Si utilizamos una cesta o bolsa de las que son reutilizables es muy bueno lavarlas con jabón y agua caliente de ser posible.
La importancia de la limpieza
Tal como un cirujano protege a sus pacientes lavándose las manos y esterilizado los instrumentos nosotros podemos protegernos a nosotros y nuestra familia manteniendo buenas normas de higiene.
1 Lávese las manos: Nunca antes en la historia había sido tan necesario seguir esta norma sencilla pero muchas veces olvidada de lavarse buen las manos.
En la alimentación sana es fundamental pues se calcula que alrededor de 80% de las enfermedades contagiosas se esparcen precisamente por las manos.
Es necesario recordar que el lavado de las manos con suficiente agua y jabón debe hacerse antes de comer, después de ir al baño y antes e incluso durante la preparación de las comidas.
2 Lave las frutas y verduras: Antes de colocarse a la venta es posible que esas frutas o verduras se hallan contaminado al estar expuestas con otras frutas, alimentos crudos o agua sucia.
3 Guardemos por separado la carne cruda: Para impedir que las bacterias proliferen hay que separarlas y usar distintos cuchillos e implementos para trabajar las carnes Rojas, blancas y pescados.
Estas sugerencias pueden ser especialmente útiles en el tiempo en que vivimos donde nuestra vida pende de seguir instrucciones sencillas pero importantes.