El escenario para el aceite de oliva en 2024 se presenta sombrío, con pronósticos que sugieren que los precios podrían alcanzar niveles nunca antes vistos.

Este aumento continuo ha desconcertado a consumidores y agricultores por igual, mientras intentan comprender las razones detrás de esta escalada y las implicaciones económicas que se avecinan.

¿Qué está causando el aumento de precios?

Muchos expertos y agricultores culpan a la sequía en España del aumento del precio desde finales del año pasado. Muchos culpan al cambio climático de este fenómeno. Sea como sea, se han desencadenado una cadena de eventos perjudiciales para la producción de aceite de oliva en España, el principal productor mundial.

Olas de calor persistentes y sequías han diezmado los cultivos, reduciendo la producción en un asombroso 55%. Este fenómeno climático extremo ha alterado los patrones tradicionales de floración y cuajado de frutos, impactando negativamente la cantidad final de aceitunas cosechadas.

Inflación y conflictividad mundial

La guerra en Ucrania ha desencadenado una espiral inflacionista que afecta a todos los sectores, incluida la producción de aceite de oliva. El encarecimiento de los costos de producción, desde fitosanitarios hasta fertilizantes, ha contribuido al aumento sostenido en los precios.

Los agricultores se enfrentan a la difícil tarea de equilibrar la calidad del producto con los crecientes gastos operativos.

Una buena noticia, la demanda permanece fuerte

Aunque España visto caer su oferta de manera significativa, la demanda se resiste a caer. Incluso con un consumo per cápita relativamente bajo en comparación con otros países, la escasez en la oferta ha llevado a un aumento constante de precios, pero afectando muy poco las preferencias de los españoles.

Los hogares españoles consumieron en promedio 22.1 litros en 2022, un aumento desde los tiempos iniciales de la pandemia, pero la producción limitada podría afectar la oferta en el futuro y tener un impacto negativo en la demanda.

¿Qué esperar del precio de aceite de oliva en 2024?

Agricultores y expertos predicen un futuro aún más desafiante en 2024. Anastasio Yábenes y Tomy Rohde advierten que el precio del aceite de oliva podría llegar a «cifras sin precedentes».

La incertidumbre climática, con patrones de floración mermados y sequías persistentes, plantea dudas sobre la capacidad de recuperación de la producción.

El aumento proyectado podría transformar el aceite de oliva de un bien esencial a un artículo de lujo. Se espera que el litro de aceite alcance alrededor de 12 euros en la primavera de 2024, una tarifa que podría limitar su accesibilidad para muchos consumidores.

Aunque se anticipa una calidad excepcional debido a la ausencia de plagas, la combinación de una producción limitada y mayores costos podría restringir su consumo a aquellos con bolsillos más holgados.

A nivel económico, los hogares enfrentarán el impacto de precios más altos. El gasto promedio en aceite de oliva por hogar en 2022 fue de 97.7 euros, la cifra más alta desde 2007. Este aumento refleja la realidad de que los productos esenciales se vuelven más costosos, desafiando el presupuesto doméstico.

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