El Síndrome de Intestino Irritable (SII), es llamado colitis mucosa, colon espástico y colon irritable, donde un trastorno funcional digestivo presenta hinchazón, dolor o molestias abdominales y alteraciones en el hábito que va desde el estreñimiento, diarrea o ambos.

El diagnóstico del síndrome de intestino irritable está unido a la presencia de dolor o molestias abdominales, cambio en la frecuencia o consistencia de las deposiciones durante 3 o más días al mes, durante al menos 3 meses, siendo los síntomas presentes los últimos 6 meses antes del diagnóstico médico.

Existen una serie de síntomas que se asocian al SII, pero no son esenciales para establecer el diagnóstico, estos son: Sensación de evacuación incompleta, moco o esfuerzo excesivo al defecar.

Dieta para el colon irritable

La alimentación de una persona con colon irritable debe ser equilibrada, variada y poco restrictiva, existen una serie de productos que son asociados a la presencia de gases y distensión abdominal, molestias abdominales, estos son:

Café, alcohol, refresco, chocolate, verduras crudas, verduras flatulentas como la col, brócoli, coliflor, cebolla, lácteos, legumbres, germen de trigo, alimentos grasos, espaciados y picantes. Es necesario el asesoramiento individual, ya que las intolerancias personales están presentes en personas con intestino irritable.

Alimentos recomendables para el SII

En la dieta se puede incluir cereales como: Arroz, maíz, trigo sarraceno, mijo, quinoa blanca, patata, carne, huevo, pescado. Las bebidas vegetales como almendras, avena, arroz, están mejor enriquecidas en calcio.

Hortalizas como endivias, acelgas, judías verdes, zanahoria, tomate, frutas como el plátano, el melón, arándanos y mandarina, las intolerancias a ciertos alimentos marcaran la dieta a seguir y no todos toleran igual los mismos alimentos.

Los frutos secos y semillas son alimentos que se deben limitar, la cantidad marca la diferencia entre tolerar o no el alimento. De nuevo la recomendación es individual, para que la alimentación sea lo más adaptada a los síntomas de la persona.

Alimentos a evitar

Para cualquier persona que no padece de síndrome de intestino irritable se recomienda evitar los alimentos ultraprocesados, ricos en azúcar, grasas trans y aditivos que van a dificultar y a empeorar el tránsito intestinal y la salud de la microbiota.

Se debe evitar la ingesta de fibra y cambiar por la fibra soluble, presente en verduras, hortalizas y frutas que la fibra insoluble, presente en cereales integrales, no se puede digerir y dan lugar a molestias típicas como gases, hinchazón, por lo tanto, se deben evitar.

Factores relacionados con el SII

El estrés es el principal, la ansiedad o la depresión, según estudios indican que estos no causan el síndrome de intestino irritable. El estrés altera la microbiota intestinal, beber alcohol y fumar causa daños a la mucosa intestinal, la actividad física moderada mejora la distensión abdominal y el tránsito intestinal.

Recomendaciones

La ingesta adecuada de agua, unos 2 litros al día, es necesario para facilitar el tránsito intestinal, evitar que las heces se endurezcan y en episodios de diarrea, se debe hidratar mucho más.

La lactosa es un carbohidrato que se absorbe mal en el intestino delgado y favorece la aparición de gases. Las personas que son intolerantes al gluten, se benefician al excluir el gluten de su alimentación, se puede eliminar los fructanos presentes en el trigo.

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